Craft apoya el proyecto social de un colaborador en el interior de Brasil
Es posible que hayas oído hablar de Eduardo José, el nombre a la vanguardia de los servicios de almacenamiento de Craft. Más recientemente, también debes haber oído hablar de Eduardo José, el creador del nuevo producto de la marca, que se anunciará próximamente al mercado. Y Eduardo José, quien se dedica a la obra social de Confraria Macambira (Hermandad Macambira), ¿lo conoces?
En 2012, Edu o Zé, o Edu Zé, como también se le llama, se unió a su hermano y primos en un proyecto para contribuir a la ciudad natal de su padre y parte de su familia, una ciudad que está al lado de la de su madre, Lagarto, en el interior del estado brasileño de Sergipe. “Es mi lugar de nacimiento, aunque no nací allí”, dice Eduardo José, quien es de Santos, en la costa de São Paulo, pero siempre ha visitado y mantenido vínculos con Macambira. «De adulto, uno de mis hermanos quiso devolverle todo lo que nos dieron nuestros orígenes».
En sociedad con dos primos que viven en la ciudad, crearon la Confraria Macambira, que comenzó con un registro mínimo de las familias que más ayudaban. En el primer año del proyecto, con el monto recaudado, se distribuyeron sesenta canastas de alimentos básicos. Ahora son más de mil, además de artículos para el hogar, ropa y juguetes entregados cada diciembre para adultos y niños en cinco ciudades o pueblos: Campo do Brito, Lagarto, São Domingos, Olho d’Água y la ya famosa Macambira.
Este año, Craft apoyó al grupo, ayudándolo para comprar y distribuir 3500 juguetes. Además de regalos para los niños, se entregaron 70 cajas con menaje para el hogar, con pantalones y zapatos para la población local.
La iniciativa ha contribuido a elevar la calidad de vida en la región. El último censo del IBGE (Instituto Brasileño de Geografía y Estadística), de 2010, midió el IDH (Índice de desarrollo humano) desde 0.583 hasta el municipio de Macambira. De acuerdo con o Ipea (Instituto de Investigaciones Económicas Aplicado), un IDH entre 0,50 y 0,799 se considera promedio. Macambira, por tanto, pasa raspando. Y ya fue más complicado. En 1991, el IDH de la ciudad redondeaba el 0,3.
Es por ideas brillantes como esta que Craft cree en su gente. Y llega a la recta final del año con ese sentimiento de gratitud que le llena el pecho. Ve, Edu. Ve, Joe. #GoCrafter